“MATAR AL MENSAJERO”

Ángel Tristán: “Matar al mensajero es una táctica muy utilizada por los que se sienten afectados y en peligro por la lucha contra la corrupción”

El periodista canario ofreció días atrás una conferencia en el IEHC sobre los medios de comunicación en la lucha contra la corrupción

La lectura de un artículo de Mario Vargas titulado ‘El cuarto poder’ y publicado en el rotativo EL PAÍS, sobre un novelista que explica a su padre por qué no quiere ser marino sino periodista, dio comienzo recientemente, en el Instituto de Estudios Hispánicos de Canarias (IEHC), a la conferencia ‘Los medios de comunicación y la salud democrática: el papel clave de la prensa independiente en la lucha contra la corrupción en Canarias”, a cargo del periodista y escritor Ángel Tristán Pimienta. El acto contó con la asistencia de la alcaldesa portuense, Lola Padrón; el diputado regional del PSC, Santiago Pérez; y el presidente del IEHC, Nicolás Rodríguez Münzenmaier, entre otros.

El periodista canario dijo en su exposición sobre la corrupción que “es un problema casi endémico con el que nos tropezamos en España, en general, y en Canarias en particular. Demasiados políticos y empresarios, y una parte de la sociedad, consideran normal lo que es anormal. Hay que destacar en cualquier análisis sobre el periodo que estamos viviendo, que ante los primeros episodios de la lucha organizada contra la corrupción, sobre todo urbanística, la reacción de los partidos afectados por el virus ha sido la de, sin negar la mayor, denunciar la existencia de un complot tramado por los adversarios políticos”.

“Matar al mensajero, como hacían los jefes griegos cuando los jinetes exhaustos por la cabalgada les llevaban malas noticias de las batallas lejanas, - afirmó Tristán - es una táctica muy utilizada por los que se sienten afectados y en peligro por la lucha contra la corrupción. Ya lo dice la vieja máxima: la mejor defensa es un buen ataque. O poner en marcha el ventilador de la sospecha”. Asimismo, destacó que los supuestos implicados en las diferentes tramas de corrupción en Canarias, siempre alegan que se trata de una persecución política a través de la Justicia. Como ejemplos de esta tesitura citó el caso ‘Eolo’; el ‘Faycan, en Telde; el ‘Brisan’ en Santa Brígida; el ‘Góndola’, en Mogán; el de ‘Las Teresitas’ y ‘Forum Filatélico’, en Santa Cruz de Tenerife, el de ‘Alcampo’ en La Laguna, etc. “Esta acusación, la de ‘persecución política’, ha logrado el efecto contrario al deseado: unir a todos los instrumentos constitucionales que forman el complejo mecanismo judicial. El Fiscal Superior de la Comunidad autónoma de Canarias, perteneciente a una asociación conservadora, ha sido rotundo: la era de la impunidad se ha acabado”.

Libertad de prensa, columna vertebral de la democracia

Para Tristán la libertad de prensa es esencial para garantizar las libertades en la actual sociedad de la información sobre la que se asienta la democracia del siglo XXI. Además, el periodista sostiene que “los temas relacionados con la corrupción, y en general con la administración pública y las controversias políticas, interesan mucho a los lectores de la prensa. La constante y progresiva perfección de la democracia, con el afinamiento de las leyes gracias a una jurisprudencia uniforme en Europa, es una señal en la buena dirección: la ‘libertad de prensa’ seguirá asumiendo, pese a las contradicciones y a las ovejas negras de todo colectivo, un papel de liderazgo en el control de los poderes y en la denuncia de las conductas irregulares o impropias, al servicio de la opinión pública, que es una columna vertebral de la Democracia”.

Ángel Tristán Pimienta nace en Las Palmas de Gran Canaria en 1948. Inicia su actividad periodística en 1964 en una revista colegial. EN 1966 publica algunas colaboraciones en el Diario de Las Palmas. En 1967 comienza su vinculación con La Provincia, periódico en el que ha desarrollado gran parte de su carrera profesional y en el que permanece, en esta primera etapa, hasta 1968. A partir de esta fecha desempeña las corresponsalías en Las Palmas de Gran Canaria de la revista Gaceta Ilustrada, del semanario económico Desarrollo y de la publicación progresista Cuadernos para el diálogo. En 1970 regresa a la redacción de La Provincia, donde ejerce ininterrumpidamente hasta la actualidad, con un breve paréntesis en 1987 en el que trabaja como subdirector del Faro de Vigo. Desde 1982 mantiene una sección diaria de opinión, «Apuntes». Se ha especializado en temas de urbanismo, relaciones internacionales y seguridad y defensa y ha participado en numerosos cursos y congresos relacionados con estas disciplinas. En 2005 es nombrado director del periódico La Provincia.