La Iglesia de San Juan Bautista de la Villa Arriba acoge el próximo sábado, 14 de junio, a las 20:00 horas, la presentación del libro “El legado del Farrobo. Bienes patrimoniales de la parroquia de San Juan Bautista”, una obra del joven orotavense Juan Alejandro Lorenzo Lima (1982) , becario de investigación del Departamento de Historia del Arte de la Universidad de Granada).Este libro, que editan conjuntamente el Ayuntamiento de La Orotava y la propia parroquia de San Juan Bautista, es realmente un ensayo en el que se estudian los principales bienes de este templo que ahora cumple 400 años de historia. Por ello, además de una síntesis histórica general, la obra se centra en un total de cuarenta piezas que componen un catálogo. Entre éstas se incluyen creaciones pertenecientes a la ermita fundacional, algunas adquiridas poco después de la declaración parroquial y otras donadas o cedidas entre los siglos XVIII-XX. En este contexto adquieren interés los enseres que la mayordomía obtuvo a raíz de la Desamortización de Mendizábal (1835-1836), cuando ingresaron en el templo de la Villa Arriba obras de los ya extintos conventos de San Lorenzo (frailes franciscanos), San José (monjas clarisas) y Nuestra Señora de Gracia (religiosos agustinos). Obviando compras o añadidos posteriores, en ese periodo la parroquia define su aspecto actual y recibe el mayor aporte de piezas que ha conocido en sus cuatrocientos años de historia.
De obras que ya son conocidas, el autor aporta nuevas noticias documentales que posibilitan un adecuado conocimiento de su significación histórica. Aunque lo más llamativo del catálogo radica en el análisis y muestra de creaciones que pasan, hasta la fecha, casi desapercibidas para la historiografía insular y para los propios fieles. “Así, por ejemplo, resulta fundamental el estudio de las reformas promovidas en el presbiterio coincidiendo con el prolífico curato de Francisco Frías (década de 1780) o algunas imágenes como el Señor Muerto (vinculado por Amador Marrero con el imaginero sevillano Francisco de Ocampo) y San Cayetano o la Virgen del Buenviaje, tal vez encargos atendidos por el maestro tinerfeño González de Ocampo (1651-1714). Otras, en cambio, prescinden de la catalogación habitual para ser relacionadas con artistas de mayor cercanía a sus cualidades plásticas. El caso de la Virgen del Carmen y su improbable vinculación con Luján Pérez podría ser muestra de ello, aunque la escasez de documentación impone cautela a la hora de establecer hipótesis y atribuciones concluyentes sobre el tema. No es ésta la situación de alhajas como la custodia grande que ahora adscribo al platero Antonio Agustín Villavicencio (1727-1801) o el ciclo pictórico que decora la capilla mayor, probable trabajo de Cristóbal Afonso (1742-1797)”.El criterio de selección está condicionado por la importancia de las piezas y la necesidad de estudiar con ellas la evolución del templo, incluyendo sobre todo representaciones escultóricas de variado origen. También tienen cabida algunas manifestaciones pictóricas, suntuarias (esencialmente platería) y lignarias (retablos y tabernáculo del presbiterio), testimonio en ocasiones de necesidades concretas e inquietudes comunes. Ha primado la intención de plantear una visión precisa de lo que significa la efeméride conmemorada o sus implicaciones afectivas para la comunidad de fieles que conformó en el pasado la populosa Villa de Arriba. En los comentarios se advierten aspectos esencialmente históricos, incidiendo en la atención que despertaban dichos enseres y las actividades devocionales o de patrocinio que se generaron a su alrededor.
La finalidad del proyecto—detalla el propio Juan Alejandro Lorenzo Lima-- radica en musealizar la parroquia un tiempo, desde este mes de junio hasta el próximo septiembre, permitiendo la relación directa de los visitantes con las obras en su ubicación habitual. “Para ello se ha generado un itinerario en su interior que posee igual número de cartelas y fichas catalográficas”, puntualiza. Los contenidos se completan en la publicación con un capítulo introductorio que se subtitula Los tiempos de una historia, clara referencia a las etapas que posibilitaron la conformación del templo actual, los diferentes espacios de culto y su ornato posterior.
En su mayoría el material de archivo proviene de la documentación generada por la fábrica parroquial, cuyos fondos fueron depositados en el Archivo Histórico Diocesano de Tenerife (La Laguna) el pasado 2005. Sus contenidos se han completado con referencias extraídas de varios centros de la Isla: Fondo Antiguo de la BULL, Biblioteca y Archivo Municipal de La Orotava, Archivo Familia Betancourt y Castro, antiguo Archivo Familia Perdigón, Archivo Histórico Provincial y parroquial de La Concepción, La Orotava. A él cabe sumar un importante aparato crítico y el respaldo bibliográfico.
La publicación cuenta con un total de 185 páginas y es ilustrada con fotografías a todo color en un apéndice final.
El acto de presentación estará presidido por el alcalde de La Orotava Isaac Valencia Domínguez; el párroco de San Juan, Pedro Jorge Benítez y el propio autor Juan Alejandro Lorenzo Lima, además de contar con otras autoridades locales y eclesiásticas, y público en general.
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