sábado, 7 de junio de 2008

I.E.S. LA OROTAVA MANUEL GONZÁLEZ PÉREZ, MÁS DE TREINTA AÑOS DE HISTORIAS.

Artículo recibido de: Bruno Juan Álvarez Abreu

En el caserón neoclásico - sede actual del Consistorio de La Orotava - construido en el año 1895 sobre las piedras del convento de las Claras, según proyecto del arquitecto don Manuel de Oraá, empezó a funcionar, en el año 1976, el Instituto de Formación Profesional de La Orotava, hoy Instituto de Enseñanza Secundaria La Orotava -Manuel González Pérez.

Las clases empe­zaron el día uno de Marzo del mencionado año en horario de tarde. Entonces la adminis­tración funcionaba como sección delegada del politécnico de Santa Cruz de Tenerife. Sus primeros profesores fueron: don José Dorta Hernández (q.e.p.d.) como profesor dele­gado, don Carlos Díaz y Díaz, don Guillermo Graham Hernández, doña Carmen Álvarez Abreu, don Félix Calzadilla Rocío (q.e.p.d.), doña Ofelia Díaz Fernández, Reverendo don Hernando Perdomo; don Abel Hernández Belza, doña Alicia Correa como profesores de Educación Física; doña Carmela Domínguez Hernández (q.e.p.d.), profesora de manualidades, y don Cándido Figueroa (q.e.p.d.) para las prácticas de Madera.
En el acta correspondiente a la primera evaluación, celebrada el día 23 de Abril de 1976, se reflejan las palabras de apertura de don José Dorta Hernández como profesor delegado del Centro, recalcando que era importante trabajar en equipo, puesto que los alumnos procedían de distintos niveles culturales.
El día cuatro de Mayo del mismo año se constituyó la primera comisión para otorgar becas. Estaba integrada por el profesor don Guillermo Graham como presidente, la profesora doña Carmen Álvarez Abreu como secretaria, el profesor don José Dorta Hernández, los padres de alumnos don Manuel García Oramas y don Pedro Rodríguez García y los alumnos don José Manuel Pérez González y don Adolfo Padrón Pacheco.
El 16 de Junio de 1976, el instituto pasa a ocupar unos barracones en la finca que había sido propiedad de la familia Salazar en el barranco de San Antonio, adquirida por el Cabildo Insular de Tenerife, a la espera de la construcción del nuevo edificio. En el curso 1976-77, se incorporan 2 nuevos profesores, don Francisco Guerra de Paz y don José Domingo González Fariña. En Octubre 1976, comienza el primer curso en los Barracones de San Antonio, desapareciendo la rama de Madera, incorporándose la de Automación. Se adquieren los primeros libros para la Biblioteca, una Enciclopedia Larousse y un Atlas Aguilar. En el siguiente curso 1977-78, se incorpora un nuevo profesor de Física, don Juan Francisco Reyes González. En ese curso continúa la primera directiva interina del centro, puesto que todavía sigue perteneciendo al Politécnico de Santa Cruz: Director - profesor delegado don José Dorta Hernández; Secretaria doña Carmen Álvarez Abreu, Jefe de Estudios don Guillermo Graham Hernández, Subdirector don Félix Calzadilla Rocío y Tutor don Carlos Díaz y Díaz. El día 15 de Marzo de 1979, exactamente después de tres años de andadura como sección delegada, se convierte en Centro de Formación Profesional de La Orotava.
Su primer director fue don Guillermo Graham Hernández; le acompañan en los cargos, hasta el curso 1980-81: Subdirector don Félix Calzadilla Rocío, Secretaria doña María del Carmen Álvarez Abreu y Jefe de Estudios don Carlos Díaz y Díaz. La plantilla aumenta a veinticinco profesores. El Centro pasa a denominarse Instituto de Formación Profesional de La Orotava. Se implanta la Rama Sanitaria en un pequeño taller laboratorio; fallece el Reverendo don Nicasio que, conjuntamente con don Ramón Padilla, ejercían la docencia como profesores de Religión Católica del Centro. Hombre ejemplar y muy bueno, a su sepelio, en la parroquia de Santiago Apóstol en el Realejo Arriba, acudieron todos sus compañeros de docencia de La Orotava.

Durante el curso 1982-83 destaca la inauguración del nuevo edificio, con sus talleres correspondientes, y la constitución, por primera vez en el Instituto, de un grupo coral polifónico por alumnos y profesores, dirigido por doña Juana Peña González. El Instituto de Formación Profesional de La Orotava a partir de ese momento se convierte en base fundamental de la formación en todos los sentidos profesionales, desde un simple mecánico, sanitario o administrativo hasta un técnico especialista en motores o en el mundo fiscal, administrativo y de gestión o en la nutrición.
En el curso 1983-84, el director don Juan Francisco Reyes González, realiza una reestructuración en su junta directiva. Doña Livia Ayala pasa a ocupar, la Subdirección y don Carmelo Vega Espada la Jefatura de Estudios, sólo repite en la Secretaría Doña María del Carmen Álvarez Abreu.
En el curso 1984-85, don Pedro Pombo Abarca releva en la dirección a don Juan Francisco Reyes González, la plantilla se eleva a cuarenta profesores. La nueva directiva queda como sigue: Subdirector don Juan Manuel Sánchez, Secretaria doña María del Carmen Álvarez Abreu y Jefe de Estudios don Carmelo Vega Espada.
En el curso 1985-86 el Sr. Pedro Pombo pasa a ocupar un puesto en la administración de la reciente Consejería de Educación; le sustituye en el cargo una grata personalidad como Director del Centro, don Fernando Sanz Calahorra. Le acompañaron en los cargos: Subdirector don Ramón Sánchez, Secretaria doña María del Carmen Álvarez Abreu, Vicesecretario don Agustín Llarena Ponte y Jefe de Estudios doña Carmen Navarro Sabina. Don Fernando sólo estuvo un curso académico, sustituido en las primeras elecciones democráticas en el Consejo Escolar por don Carmelo Vega Espada.

En el curso 1986-87, etapa del Sr. Vega Espada, por Navidades la nieve llega hasta la calle de don Nicandro González Borges. En la mencionada etapa directiva, se recuperó la Rama de Madera y se introdujo el Plan Tarragona en el Segundo Grado Administrativo, así como la implantación de la LODE, nueva Ley de Enseñanza. Se elige por mayoría de los miembros del Consejo Escolar la designación del último alcalde republicano de La Orotava.
Don Manuel González Pérez, para que el Instituto perpetúe su nombre, debido a un escrito del Catedrático de la Complutense madrileña don Jesús Hernández Perera (q.e.p.d.), en el que especifica, que siendo el Sr. González Pérez alcalde de la villa en junio del año 1936 se le concedía a La Orotava de acuerdo con la publicación en el BOE, un Instituto de Enseñanzas Medias. La orden fue abolida en la postrimería de la Guerra Civil. Al señor Vega Espada le acompañaron: Subdirector doña Rosa María Estévez, Secretaria doña María del Carmen Álvarez Abreu, Jefe de Estudios doña Amalia Pastor y Vice-secretario don Teodoro García González.
Los comentarios entre pasillos en esos años eran demasiado argumentativos, por este motivo el Sr. Vega presenta la dimisión irrevocablemente, sustituyéndole en el cargo don José Antonio de Blas Águeda en el curso 1988-89, La etapa de D. José Antonio, al que acompañan en la directiva:
Subdirectora doña Magdalena Velásquez, Jefe de Estudios don Agustín Llarena Ponte, Secretario don Fernando Sanz Calahorra, Vicesecretaria doña Carmen Navarro Sabina, estuvo marcada por la reorganización de las funciones del equipo directivo y de cada uno de los profesores, tomando como punto de partida el fortalecimiento de las tutorías, el control de los fumadores y El cambio de sede de la Secretaría del Centro, que pasa a la Sala de los Profesores y éstos a la sala que hasta ese momento ocupaba aquella. Se realiza el proyecto para la construcción de un nuevo edificio de aulas en el solar de los antiguos barracones. El Sr. de Blas, como dato curioso, fue el primer y único director de los centros educativos públicos de la Villa que acompañó, con las autoridades locales y provinciales y el clero, la procesión del Corpus en las Fiestas Mayores de La Orotava. Además, se creó la primera murga de profesores y personal no docente por las fiestas del Carnaval, se celebraron las primeras verbenas en el patio central y el primer Baile de Magos.
En el curso 1989-90, don Agustín Llarena Ponte fue reemplazado por don Ricardo González Gómez en la Jefatura de Estudio.
En el curso 1990-91 don Raúl Medina, recién incorporado al Centro, sustituye en la Subdirección a doña Magdalena Velásquez. Se implanta, además, el Modulo III de Administración de Empresas. En el curso 1991-92, a don José Antonio de Blas le sustituye don Ramón Sánchez, acompañándole Subdirectora doña Magdalena Velásquez, Secretario don Sixto Álbelo Hernández, Jefe de Estudios doña María del Pino Rosario. El Sr. Sánchez sólo duró un curso académico, por ocupar un nuevo destino en Innovación Educativa, sustituyéndole en el cargo don Ángel Arteaga Armas, al cual le acompañan en el curso 1992-93: en la Subdirección don José Antonio Ramos, Jefe de Estudios don Raúl Medina, Secretario don Sixto Álbelo Hernández y como Subsecretaria doña Silvia de la Fuente García. El mandato del Sr. Arteaga se convierte en el más largo de todos. En su misión ha habido de todo, pero su carisma de dirigente hace que se implante en el Centro la reforma educativa: ESO, Bachiller y Ciclos Formativos, pasando el Centro a denominarse Instituto de Enseñanza Secundaria (lES.) de La Orotava. Se superó así el récord de profesores (80), el doble de la década anterior. Los automóviles sobresalen el cupo de los estacionamientos, por ello se coloca una puerta con cerradura automática para evitar que se estacionen otros vehículos ajenos en el Centro. Además, se informatizó toda la administración: notas, panorámicas y faltas de los alumnos, etc.
Durante el curso 1993-94, doña Hortensia Amigó sustituye a don Raúl Medina en la Jefatura de Estudios, éste a don José Antonio Ramos en la subdirección y don Domingo González Hernández sustituye a doña Silvia de la Fuentes García en la subsecretaría.
En el curso 1994-95 se implanta el Módulo de Educador Infantil. Entre 1995 y 1998, don Ricardo Hernández Luís se encarga de la Jefatura de Estudios. Durante este periodo se crea, también, un grupo musical de profesores para realizar actuaciones de fin de curso en el salón de actos del Instituto, dirigido por don José Antonio Ramos.
En el curso 1995-96 se implanta el 3º curso de ESO y el primer curso de Bachillerato LOGSE, en las especialidades de Humanidades y Tecnología, con alumnos procedentes del Instituto El Mayorazgo.
En el curso 2000-01, toma la dirección Don José Manuel Ruiz Fuentes, el cual reestructura los cargos directivos de la siguiente manera: Vicedirectora Doña Gabriela Abreu Bermudo, Secretario Don Sixto Álbelo Hernández, Vicesecretario Don Domingo González Hernández y Jefe de Estudios Don Pedro Álvarez Rojas. Este mismo curso se implantan el 1º y 2º cursos de ESO con alumnos procedentes del Colegio Público Inocencio Sosa del Barrio de San Antonio y Santa Teresa de Jesús, Infanta Elena de La Perdoma. Durante el período de su mandato se incorpora el centro al Proyecto Medusa, coordinado por Don Juan Francisco Reyes González, además el centro se sometió a un proceso de evaluación externa. Durante este curso escolar se celebró el 25 aniversario de este centro educativo.
En el curso escolar 2001-02, sustituye en la vicedirección a Dª Gabriela Abreu Bermuda, Dª Candelaria Hernández Pérez. En este mismo curso escolar se implanta el ciclo de grado superior de Integración Social, perteneciente a la familia profesional de Servicios Socioculturales a la Comunidad.
El curso 2003-2004 registra la entrada como Directora de Doña Candelaria Hernández Pérez, con el siguiente equipo directivo; Vicedirectora Doña María Isabel Baute Báez, como Jefe de estudios Don Pedro Álvarez Rojas y como Secretario Don Sixto Álbelo Hernández. En este curso se jubila Doña Carmen Álvarez Abreu, profesora que desarrolló su tarea docente desde los comienzos de la inauguración del centro.
En el curso 2004-2005 entra en la dirección Don Sixto Álbelo Hernández y con el siguiente equipo directivo; Vicedirectora Doña Gabriela Abreu Bermudo, Jefe de Estudios Don Jesús Gonzalo Guzmán González y Secretaria Doña Carmen Navarro Sabina. En este curso se implanta el Ciclo formativo de Atención sociosanitaria. El centro participa en el proyecto IBYSS, destinado a evaluar el bienestar laboral de los docentes.
En el curso 2006-2007 el Centro ha adoptado un compromiso con la mejora continua y la satisfacción de los requisitos de los beneficiarios, así como el cumplimiento de los requisitos legales y reglamentarios y los propios del Centro. A tal fin, ha establecido y desarrollado un sistema de gestión de la calidad que incluye el establecimiento de la estrategia y objetivos para el Centro, así como su revisión. La Dirección evidencia este compromiso determinando y proporcionando los recursos necesarios para su cumplimiento.
El recinto está conformado en la actualidad por cincos edificios separados entre sí, rodeados de amplios patios y hermosos jardines.
En el patio central se encuentra el kiosco de estilo neoclásico replica del instalado en la plaza de la Constitución para la música, uno de los símbolos principal del centro. El profesor actual de ciencias Juan Montesino Barrera, nos narra un paseo por sus jardines; Cuando llegué a este Instituto, en parte recién construido, me encontré en 1983 con unos espacios estupendos para ajardinar. Existían, eso sí, a ambos lados del patio del kiosco, dos filas de bonitos naranjeros que pese a haber disminuido en número y salud, sus naranjas siguen alegrando el gusto de algún alumno/a, en el tiempo del recreo. En la parte baja están todavía las dos palmeras, el drago, un ciruelo, dos parras y el ciprés ya grande de la esquina, que logramos salvar de las obras.
En ambos lados de los talleres, sendos laureles de indias crecían margullendo sus raíces en la tierra como monstruos imparables, hasta que nos dejaron hace poco, "cansados" de estar encerrados en estos espacios pequeños. En la parte alta sobrevive un viejo peral, generoso en peras para los pájaros. Vine con algunas ideas fijas y prioritarias, como eran utilizar una sala grande para un Aula-Taller de Ciencias Naturales y aprovechar la topografía escalonada del Centro para desarrollar un Jardín de Plantas Canarias, sin muchas pretensiones pero adecuado para el estudio de nuestra flora y cerca de las aulas. Encaminado lo primero, hice un proyecto para la Administración que nos dio una ayuda de sesenta mil pesetas, gastadas en preparar algunos espacios para comenzar la siembra, con plantas del vivero del ICONA de la Laguna, con las cedidas por mi amigo Eduardo Barquín y con las que germinaron de semillas recolectadas en nuestras excursiones. Comenzamos la faena con la ayuda del entusiasta y entrañable alumnado de Administrativo, Sanitaria y Automoción del entonces Centro de Formación Profesional. Se plantaron especies de la zona baja, de los llamados bosques termófilos, del Monteverde y del Pinar, con un cierto orden en su distribución por los terrenos dedicados a jardín. También sembré, casi como un experimento, algunos tajinastes rojos del Teide que vivieron cuatro años y se marchitaron antes de florecer, lejos del clima contrastado de la cumbre de Tenerife.En la parte que linda con la carretera general, a la derecha de la entrada, destacan hoy varios almácigos, algunas sabinas, dos dragos, dos Pinos canarios, varios laureles, un madroño y otros del monte aún pequeños, junto a tres hermosas tabaibas amargas y otras no arbóreas como faros, gacias, verodes, bejeques, magarzas, margaritas majoreras, sin olvidarnos de los nispereros, de frutos que gustan a grandes y chicos y otras menos visibles como alguna mata de perejil para las tortillas. En los muros hemos cortado siempre las zarzas y respetado a la capuchina o marañuela de flores espolonadas de color calabaza, por su carácter medicinal y repelente de insectos. En la mareta frente al bar campean dos sauces machos, junto a algún árbol del Monteverde y dos matas de níspero. A la izquierda de la entrada, sobre el Salón de Actos, dominan dos pinos canarios grandes y dos más pequeños, plantados el mismo día del 84, que estuvieron unos años acoquinados por dos acacias que mientras vivieron aquí, nos agasajaban con su abundante polen alérgico. En este espacio, destinado a un pinar mixto, acompañan fayas, brezos, laureles, viñátigos, sanguinos, dos madroños, una hija y otras especies del monte plantadas más tarde, como adernos y mocanes. Junto al camino de bajada, una salvia canaria y un cerrajón de monte sobresalen con un romero y una rara gacia de Gran Canaria, a la sombra de un pino. Un par de palmeras se vienen afianzando en el lugar, lo mismo que una sabina en el límite con la carretera y sobre el patio un arbusto de oroval da cobijo a las larvas gigantes de la esfinge de la calavera, una mariposa nocturna. En el área pegada al edificio de la secretaría, se plantaron árboles de la Laurisilva o Monteverde que no han tenido un buen desarrollo, debido sobre todo a problemas de suelo.
Pueblan este lugar varios laureles, un palo blanco, un follao, un viñatigo, un til y una hija, sin olvidarnos del drago del vértice, con poco suelo que resiste el embate continuo de algún alumno “inquieto” al que le molestan sus hojas. Varios endemismos de porte pequeño se han sucedido entre los árboles como orijamas, magarzas, coles de risco, faros, tajinastes ramificados, cruzadillas, malfuradas, geranios de monte, tajoras..., y en los bordes han sobrevivido un durazno, un heliotropo tropical oloroso, una madreselva, una adelfa y una verbena medicinal de Sudamérica. En el escalón inferior, sobre el patio, junto al mayor viñátigo ya medio decrépito, destacan dos palmeras plantadas a propósito en esta repisa bien visible, como homenaje a una planta originaria de Canarias que por su porte elegante y robusto, es cultivada en todo el mundo tropical.
En las dos largas y estrechas terrazas sobre el patio se desarrolla un matorral de flora endémica, donde han quedado las más adaptadas y hoy se mantienen sin apenas manejo por nuestra parte. En el primer escalón se plantó una colección de bejeques, la mayoría de Tenerife, que se han ido extendiendo por huecos en las paredes de piedra y en los claros de estas terrazas. El número de especies, que llegó a ser de unas veinte, se ha reducido en parte por las obras de una empresa insensata que arrancó y pisó en un verano parte de estas reliquias; pero como decía el aparejador de la Administración: “de esos veroles hay muchos en los tejados”; ¡en los “tejados” de estos individuos es donde hay bien poco!. Aún así, las especies Crasuláceas restantes están a gusto en estos paredones.
En el segundo escalón, luce exuberante un matorral de palos de sangre, cabezones, tabaibas - dulces, amargas y la de Masca -, magarzas que se extienden entre los naranjos, una retama blanca, un oro de risco de los cuatro que planté, un cardón que se recuperó después de pasar su juventud en una maceta, algunas siemprevivas, varios verodes, tajinastes blancos que cambian de sitio germinando de las semillas del que muere después de florecer, una rejalgadera de floración casi continua y maravilla en un jardín, y en una esquina siempre he mantenido dos o tres especies de gacias, con sus numerosas flores amarillas. Helechos de monte crecen en las partes umbrías y las davalias enredan sus rizomas tortuosos por las paredes, igual que en los paredones de las huertas cercanas, de donde se trajeron. Todos los años, los bicácaros nos sorprenden brotando de la tierra donde guarecen sus batatas, con sus ramas delicadas a ras del suelo o trepando por los arbustos, mostrándonos, desde Febrero, sus preciosas flores rojas y acampanadas, símbolo del Bosque de nieblas y en cierta medida de nuestra flora. Sobre el polideportivo despiertan ahora las tabaibas, almácigos, margaritas y otras, después de quitar el Ficus que rompía los baños. En los parterres junto a la escalera entre los edificios, florecen en primavera los picos de paloma más amenazados de la flora de Tenerife, con pocos ejemplares en estado silvestre; de ahí la importancia de su cultivo en jardines y plazas, como primer paso hacia lo más adecuado: extenderlos en su medio natural. En las jardineras situadas frente a la casa del conserje, el bueno de Fernando Cifuentes se ha preocupado por aumentar el número de especies, tanto ornamentales como medicinales. También ha instalado en los últimos años un riego por goteo en casi todos los jardines, facilitando que en la temporada seca no se nos pierdan ciertas especies delicadas y desde que vive aquí, es una apreciable ayuda en estos menesteres.
Como se ve, otras plantas no endémicas, aunque por ello no menos interesantes, conviven aquí, como rosas, hortensias, flores de pascua, buganvillas,... y caña santa y otras medicinales, por aquello de la Fitoterapia. En suma, todas ellas cumplen al menos una función ornamental y educativa que se deduce en este “paseo” por el jardín, escrito para que compañeros y alumnos sepan lo que tenemos al lado de donde tomamos el jugo y el bocadillo, en el descanso matutino. Sirva también para reclamar una ayuda administrativa en la contratación de un jardinero, necesario sobre todo para controlar las llamadas malas hierbas. De todos modos, la vista reconfortante que los jardines nos regala cada mañana, y los cantos de los capirotes, canarios, mosquiteros, mirlos, herrerillos y otras especies de nuestra avifauna, que revolotean por ramas y flores, es suficiente pago de cualquier desvelo.
El Equipo directivo es el órgano de gobierno ejecutivo por excelencia. Por supuesto, se mueve en el ámbito de lo técnico y encarna el núcleo de la línea en el Centro Escolar, con matizaciones según los cargos. U planificación se centra tanto en los Planes institucionales de largo como de corto plazo, aunque con distintos matices. Así parece adecuado pensar que la elaboración del Proyecto Educativo será la concreción de las reflexiones habidas en el Consejo Escolar y Claustro donde el Equipo Directivo realizará un trabajo de estimulación, síntesis y redacción de las mismas; en el caso del Proyecto Curricular, su tarea parece más orientada a la dirección de su proceso de elaboración. Por el contrario, los planes a corto plazo (Programación General, Presupuesto, Memoria, etc.) constituyen el ámbito más propio de la función de elaboración del Equipo Directivo.
Las decisiones importantes se tomarán conjuntamente por todo el Equipo Directivo, no de manera particular e independiente. En este sentido es importante señalar que las personas que integren este Equipo han de mantener una relación de empatía suficiente que garantice un adecuado nivel de discusión entre ellos, formando así un grupo cohesionado y dispuesto a afrontar tanto las funciones propias de sus cargos como otras situaciones que requieran su intervención. Esta intervención se realizará a través de una actitud basada en el diálogo y la negociación. El Equipo Directivo tratará trimestralmente en el claustro todos los asuntos concernientes a la organización y gestión del centro, recogiendo las opiniones de forma democrática, para que la marcha del centro sea la adecuada. El Equipo Directivo está constituido en la actualidad por: Director: D. Luís Sixto Albelo Hernández Vicedirectora: Dª. Mª. Gabriela Abreu Bermudo Jefa de Estudios: Dª. Ascensión Hernández Padilla Secretaria: Dª. Carmen Navarro Sabina La plantilla del centro está compuesta por el profesorado y por el personal de administración y servicios.
En este curso académico 2007/2008 imparten su docencia en el centro 80 profesores y profesoras distribuidos en 22 departamentos didácticos y cuenta con 17 personas dedicadas a labores de administración y servicios. La oferta educativa actual está formada por un largo panorama de estudios: Educación Secundaria Obligatoria. Modalidades de bachillerato: Humanidades y ciencias sociales, ciencias de la naturaleza y la salud, Tecnología. Ciclo formativos de grado medio: Atención socio sanitaria, electromecánica de vehículos, Fabricación a medida e instalación de carpintería y mueble. Gestión administrativa. Ciclos Formativos de Grado superior: Educación Infantil, Integración social, Administración y Finanzas, Dietética y nutrición. Programa de garantía social; Iniciación a la carpintería, Ayudante de reparación de vehículos. Enseñanzas parciales; Procesos contables y tributarios Operaciones básicas mecanizado. Enseñanza a distancia; Educación Infantil.
En el mes de febrero del año 2001 el IES La Orotavadecide perpetuar el nombre de don Manuel González Pérez. Alcalde de la Villa durante la segunda Republica española, el cual se propuso como objetivo potenciar la enseñanza en todos los niveles y solicitó para su pueblo un instituto de enseñanza media, en el año 1936.

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